De la mano de la beca “Vocación de maestro”, Camila Valenzuela logró convertirse en profesora de inglés, licenciada en educación en la UNAB y partió a Inglaterra a realizar su maestría. Fue allí donde comenzó el emprendimiento de lo que hoy es EdTech Startup, en la que ayuda con un modelo eficiente y accesible creado por ella misma, al aprendizaje del idioma y al desarrollo de habilidades tanto blandas como lingüísticas.

De las herramientas entregadas por la universidad destaca el aprendizaje del idioma mismo y de las metodologías de enseñanza, lo que junto a las prácticas laborales fueron clave para descubrirse como docente y enamorarse más de su carrera.

¿Por qué elegiste la UNAB como casa de estudios y cómo recuerdas tu paso por la vida universitaria?

Cuando hice mi búsqueda para elegir universidad, lo principal era la malla curricular y el ambiente académico. La UNAB cumplía con ambas: En 4 años me permitía conseguir la licenciatura en educación además del grado de profesora de inglés. Tengo muy buenos recuerdos de mi paso por Casona. Disfrutaba todo, desde las clases hasta las ventanas, que en un momento eran eternas… Entre compañeros existía harto apoyo que se comparte hasta el día de hoy. También sigo en contacto con amigos que siguen siendo parte importante de mi vida.

Dentro de los profesores que tuviste en la universidad, ¿hay alguno que haya influido en tu camino y te haya motivado?

Tuve la fortuna de tener profesores increíbles, con los que sigo en contacto y han sido un apoyo fundamental en mi carrera. Como, Sofía y Céspedes fueron los que marcaron enormemente mi paso por la universidad. A ellos les agradezco también el apoyo para llegar a donde estoy hoy. También recuerdo con cariño a Tamara y Arcaya, que me contagiaron su amor por la Lingüística, área en la que me he seguido perfeccionando y la cual me trajo a Inglaterra.

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¿En qué estás actualmente?

Luego de terminar mi maestría en Inglaterra, con mi esposo Sebastián nos aventuramos al mundo del emprendimiento, abriendo nuestra EdTech Startup con el apoyo de la Universidad de Essex. Vimos que aprender gramática y vocabulario en inglés no es suficiente para poder usarlo efectivamente, sino que existe además un conjunto de habilidades que nos permiten comunicarnos exitosamente en este idioma universal. Nos dimos cuenta de que no solo a los chilenos nos cuesta hablar inglés, sino que es un problema a nivel global, algo que vimos en mis propios compañeros internacionales: muchos podían entender lo que leían, pero no se atrevían a levantar la mano para dar su opinión por falta de confianza en sus habilidades. Así que luego de harta investigación, creé un modelo para el aprendizaje del inglés de forma 100% online en vivo, donde el inglés se usa como catalizador para adquirir habilidades transferibles que nos convierten en personas valiosas en cualquier contexto. Nuestro modelo ha demostrado ser más eficiente, motivante, accesible y eficaz. Puedo decir con orgullo que hemos logrado cambiar la forma de aprender inglés online haciendo que nuestros alumnos disfruten cada clase en nuestra plataforma que es completamente interactiva, y viéndolos triunfar al cumplir sus objetivos.

Después de varios meses de trabajo, acabamos de publicar nuestra página web www.weareltl.com, por lo que estamos ansiosos por seguir creciendo. Siempre contamos con programas individuales y ahora estamos ofreciendo nuestros programas grupales en horario tarde para Chile.

¿Cuáles son los desafíos que enfrentas en tu día a día?

El principal desafío siempre ha sido vivir en el extranjero. Si bien vivir y estudiar acá ha sido un sueño cumplido, estar lejos de la familia, amigos y red de apoyo no es fácil. Agradezco enormemente a la tecnología por hacerlo un poco más llevadero.

Con relación al trabajo, jamás pensé que entraría al ‘mundo del emprendimiento’, menos aún en otro país, así que ha sido un proceso de aprendizaje largo e interesante, que me ha traído un par de lágrimas, pero muchas más risas, buenos amigos, celebraciones y reconocimientos de lo que me hubiese imaginado un par de años atrás. Soy profesora de inglés y me perfeccioné en Diseño de Aprendizaje Universal y en Lingüística Aplicada, pero he aprendido de contratos, contabilidad, recursos humanos, planes de negocios y un montón de cosas más que nunca pensé manejar. Al final del día el desafío siempre es celebrar los triunfos, aunque sean pequeños, y no ver solo los problemas.

¿De qué forma contribuyes, desde lo que haces o desempeñas, a la sociedad?

Siempre que querido sentir que de alguna forma contribuyo a que la vida de algunas personas sea un poco mejor. Probablemente fue una de las motivaciones que tuve para hacer una carrera en educación. Hoy me gusta pensar que mis alumnos, y los que vendrán en un futuro, lograrán cumplir alguno de sus sueños y objetivos de vida gracias a las herramientas que adquirirán con nosotros. Más que lo que yo crea que estoy haciendo por contribuir, creo que se trata de ver lo que los demás logran al estar con nosotros. Por ejemplo, ir a estudiar a Canadá, ir a vivir a un país de habla inglesa, ser promovidos en sus trabajos, e incluso atreverse a levantar la mano en la clase de inglés en sus colegios. Creo que al hacer la adquisición de herramientas fundamentales para comunicarse efectivamente en el idioma universal más accesibles, eficientes, motivantes y eficaces, hará que logremos reducir enormemente la brecha social, económica y educacional que el no poder comunicarnos en la lengua ranca nos ha impuesto como barrera hace años, y que cada año crece.

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