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12 septiembre, 2025

María de los Ángeles Ibaibarriaga, fundadora de Biombillas: “Queríamos demostrar que sí se puede hacer un producto funcional y sustentable”

BiombillasTitulada de Ingeniera Ambiental y fundadora de Biombillas, una innovadora empresa chilena que busca reemplazar los plásticos de un solo uso con soluciones biodegradables, nos comparte su recorrido académico, profesional y emprendedor, destacando su fuerte conexión con la naturaleza, su paso por la UNAB y los desafíos de emprender con impacto en Chile.

¿Dónde estudiaste y cómo llegaste a la universidad?

Estudié Ingeniería Ambiental en la Universidad Andrés Bello, en la sede República de Santiago y me titulé el 2013. Desde siempre tuve una gran conexión con la naturaleza. Aunque no tenía claro qué estudiar al salir del colegio, sabía que quería dedicarme a algo relacionado con la biodiversidad y la conservación.

En esa época, no había muchas carreras que abordaran estos temas directamente, pero la UNAB ofrecía Ingeniería Ambiental, así que decidí postular y desde el comienzo sentí que era mi vocación.

Biombilla¿Qué recuerdos tienes de tu paso por la universidad?

La universidad fue una experiencia muy entretenida y enriquecedora. Fue un cambio total, conocer nuevas personas, nuevos temas y salir de mi círculo habitual. Hice grandes amigos, varios de los cuales hoy siguen trabajando como ingenieros ambientales. En República, el Campus está dividido en distintos edificios, lo que no da tantos espacios comunes, pero igual nos las arreglábamos para pasarlo bien.

¿Hubo algún profesor o profesora que marcara tu camino?

Sí, varios. Verónica Droppelmann, directora de carrera en ese entonces, fue muy importante para mí. Tenía un enfoque muy apasionado, sobre todo en temas de agua, y era muy exigente. Su ramo, Tratamiento de Aguas, fue muy desafiante, pero me marcó por su vocación y entrega.

También Cristian Belmar, mi profesor de título, quien me inspiró muchísimo por su capacidad de integrar distintas miradas sobre lo ambiental y la sostenibilidad. Siempre incorporaba la dimensión económica, social y ecológica de los problemas, y eso amplió mucho mi forma de pensar.

¿Cómo nace Biombillas y en qué consiste?

Biombillas nace como una epifanía. En 2018, cuando comenzaba a visibilizarse el impacto de los plásticos de un solo uso, especialmente las bombillas, surgió una campaña del Ministerio del Medio Ambiente llamada Chao Bombillas. En ese contexto, Jorge, mi actual socio y agrónomo, recordó que cuando era niño usaban cañas de centeno como bombillas.

Nos propuso desarrollar un producto con ese material y nos dimos cuenta rápidamente de que funcionaba muy bien. Al ser vegetal, no se deshace como el papel, es compostable en cualquier medio y mantiene una buena experiencia de uso. Así nació Biombillas, con la idea de crear un producto que fuera realmente funcional y 100% sustentable.

biombillasDesde el inicio supimos que queríamos escalar este proyecto en grande, no como un producto exclusivo, sino como una solución masiva. En 2020 abrimos nuestra primera planta de producción con maquinaria diseñada por nosotros mismos.

¿Qué herramientas de tu formación académica sigues utilizando hoy?

Sin duda, la visión de conjunto que entrega la carrera. Ingeniería Ambiental parte con una formación amplia en ingeniería y se va especializando, lo que me permitió abordar la creación de una industria sustentable desde todos los frentes: eficiencia energética, gestión de residuos, uso del agua, etc. Hoy, nuestra planta opera con procesos optimizados para alcanzar casi cero residuos.

¿En qué está actualmente Biombillas y qué viene a futuro?

Hoy estamos en un proceso de escalamiento industrial. Hemos sido pioneros en la producción semi-industrial de bombillas vegetales, pero aún nos falta mucho para llegar a una automatización total. El objetivo es poder franquiciar el modelo de planta y expandir el proceso a otros países o regiones, no solo con bombillas, sino también con otros productos como tapas de café o contenedores.

Nos gustaría que en cinco años, Biombillas no solo sea una marca, sino una plataforma de biomateriales funcionales y compostables para reemplazar distintos plásticos de un solo uso.

¿Cómo crees que hoy estás contribuyendo a la sociedad?

Contribuimos en varias dimensiones. En lo social, generamos empleo en zonas rurales: hoy tenemos a más de nueve mujeres trabajando en nuestra planta ubicada en Lolol. En lo ambiental, reemplazamos bombillas plásticas con un producto que se comporta naturalmente en cualquier medio. Y en lo económico, aportamos al mercado con una nueva categoría de producto, abriendo camino para que otros se animen a emprender en esta línea.

Tratamos de crear conciencia sobre los materiales que usamos y cómo se pueden hacer las cosas de forma distinta, más conectada con la naturaleza.

¿Cuáles son los desafíos de emprender en Chile?

El mayor desafío que hemos enfrentado es la falta de infraestructura tecnológica. En Chile no se fabrican las maquinarias que necesitamos, lo que encarece e impide escalar más rápido.

A nivel general, el emprendedor siempre tiene que competir con productos ya establecidos y romper paradigmas. Hay una gran resistencia al cambio, y convencer al mercado de que tu producto es mejor no es fácil, especialmente si eres pequeño.

Por último, el desafío de lograr que tu producto no solo sea sustentable, sino competitivo en precio, calidad y logística. Eso requiere mucha creatividad y una propuesta de valor sólida.

¿Qué consejo le darías a alguien que quiere emprender, especialmente en ingeniería ambiental?

Primero, que tenga muy clara su propuesta de valor y que esta sea coherente con sus propios valores. Esto hace que tu proyecto tenga alma y sea creíble. En Biombillas, nuestra coherencia entre producto y proceso ha sido clave para abrir puertas.

Segundo, que se enamore del problema, no solo de la solución. Y tercero, que esté dispuesto a aprender de todo: comercial, marketing, certificaciones… Emprender requiere mente abierta, paciencia y mucha pasión. También es clave conectar con otros, porque sin redes es muy difícil avanzar.